miércoles, 1 de diciembre de 2010

METODOLOGÍA



Criterios de uso de la metodología




• Paso del carácter verbalista al procedimental e intuitivo. Aprendizaje más que enseñanza.


Las competencias como referente curricular supone una exigencia para ir abandonando el método tradicional de carácter predominantemente verbalista en beneficio de otros de carácter más procedimental e intuitivos en los que el alumno tenga cada vez más protagonismo en el proceso de enseñanza-aprendizaje, se trata de convertir los actos que se celebran en el aula en actos de aprendizaje más que de enseñanza y relegar nuestro acaparador protagonismo al momento de la planificación.



• Variedad metodológica. La clase no es un espacio uniforme y homogéneo.
• Combinación de una metodología inductiva y deductiva con tres principios importantes: experimentación, manipulación y contextualización.
• Desarrollo de técnicas para aprender.

El currículo debe ir más allá de los aspectos conceptuales para desarrollar destrezas, habilidades y, sobre todo, actitudes.
Es necesaria una combinación de una metodología inductiva y deductiva con tres principios importantes: experimentación, manipulación y contextualización.
Para que esta área contribuya al desarrollo de la competencia para aprender a aprender, deberá orientarse de manera que se favorezca el desarrollo de técnicas para aprender, para organizar, memorizar y recuperar la información, tales como resúmenes, esquemas o mapas mentales que resultan especialmente útiles en los procesos de aprendizaje de esta área. Por otra parte, la reflexión sobre qué se ha aprendido, cómo y el esfuerzo por contarlo, oralmente y por escrito, contribuirá al desarrollo de esta competencia.


• Uso de metodologías de investigación progresivamente adecuadas a cada nivel.
• Práctica frecuente de trabajos de tipo colaborativo.

Es importante el uso de metodologías de investigación progresivamente adecuadas a cada nivel. Se trata de realizar una planificación diacrónica en la que desde los primeros niveles pueden establecerse pequeños pasos de investigación que realizados de una forma sistemática van capacitando al alumno para esa destreza. En estas metodologías es importante institucionalizar el uso de la biblioteca del centro.
Incluir la práctica frecuente de trabajos de tipo colaborativo.


Establecer una serie de rutinas:
o Que el alumno conozca desde el principio el sentido de lo que hace, los objetivos que se persiguen, los conocimientos que se buscan.
o Utilización sistemática de distintos tipos de lectura para distintos objetivos perseguidos: visualización de la estructura del tema, de sus apartados; lectura rápida y lectura atenta…
o Utilización sistemática de procedimientos analíticos y de síntesis.


• Abandono del libro de texto como eje único de la práctica docente.
• Variedad de contextos.
• Flexibilidad en la agrupación.

Es necesario huir de enfoques que convierten la clase en un espacio uniforme y homogéneo organizado para dar respuesta al alumnado “tipo”, no hay pues un método único y universal que pueda aplicarse a todas las situaciones y a todos los alumnos. Esta necesaria variedad es perfectamente compatible con un trabajo sistemático en el sentido de que se ha de tratar de un trabajo planificado, sincrónico y diacrónico en el tiempo. La planificación no puede ser incompatible con prestar atención a la actualidad que genera conocimiento en la medida en que es significativa para el alumno. Estas actuaciones ocasionales no supone improvisación sin más, falta de preparación y de recursos, pérdida de rigor y de la perspectiva de los objetivos perseguidos.

• Emplear estrategias distintas para hacer llegar la información a los alumnos: la palabra, el texto, la imagen, ... y ello mediante materiales didácticos también diversos: libros, láminas, vídeos, soportes magnéticos, soportes informáticos, redes telemáticas...


ORIENTACIONES METODOLÓGICAS CONTEMPLADAS EN LA LEGISLACIÓN

1. El aprendizaje es un proceso de construcción social del conocimiento en el que intervienen, de manera más directa, el alumnado, el profesorado y las propias familias. El grupo de clase se constituye, por tanto, como un espacio natural de aprendizaje que es necesario utilizar y potenciar mediante el trabajo cooperativo.
2. El trabajo cooperativo facilita el aprendizaje pues permite el contraste de puntos de vista, el intercambio de papeles, estimula la motivación por el trabajo desde el refuerzo social, facilita el desarrollo de capacidades asociadas al uso del diálogo, la resolución de conflicto, la ayuda, la responsabilidad en la tarea, etc.
3. La construcción del aprendizaje se produce cuando la enseñanza facilita que el alumnado establezca relaciones entre lo que aprende y lo que sabe y esto se favorece siempre que: se utilizan estrategias de presentación atractivas; existen y se dan a conocer unas metas claras y definidas; los contenidos conecten con sus intereses o sean funcionales; los contenidos estén organizados; las actividades estén secuenciadas y ajustadas a las posibilidades de respuesta; y cuando, para la enseñanza y el aprendizaje se facilita el uso de distintos códigos de comunicación y representación.
4. La motivación del alumnado hacia el aprendizaje aumenta cuando conoce el sentido de lo que hace; tiene posibilidad de implicarse en la tarea, desde la definición de los objetivos hasta la evaluación, pasando por la posibilidad de elección de las actividades; y puede aplicar lo aprendido en otras situaciones.
5. El éxito de la enseñanza está asociado a la capacidad del profesorado para diseñar en un único proceso actividades diferenciadas y adaptadas a la diversidad del alumnado; de valorar y graduar su ayuda en función del progresivo desarrollo de la autonomía en los aprendizajes; y también las que implican al conjunto del alumnado.
6. El desarrollo de habilidades de revisión del aprendizaje alcanzado, asociado a la práctica de autocorrección o de corrección compartida, por parte del alumnado permite aprender del error y evitar el riesgo de consolidarlo. El aprendizaje necesita un adecuado clima de clase que reduzca al máximo las interferencias. La organización del espacio y el tiempo y la distribución de los agrupamientos son decisiones relevantes a la hora de controlar el aprendizaje.
8. La colaboración con las familias es la estrategia más eficaz para el desarrollo de un proceso educativo. El reto, por tanto, para el profesorado está en conseguir que todos y todas reciban una educación de calidad, que alcancen el máximo desarrollo de sus capacidades sin renunciar, por ello, a que lo hagan en condiciones de igualdad sin exclusiones.
9. La organización del tiempo escolar debe ser flexible para permitir al profesorado enseñar y al alumnado aprender sin saltos ni fragmentaciones. .
10.La organización del espacio del aula debe permitir el desarrollo de las diferentes situaciones de enseñanza y aprendizaje, individuales y compartidas, explicaciones y trabajo autónomo de consulta; trabajos comunes y diferenciados. Asimismo, para contribuir a la creación de un ambiente de trabajo y crear hábitos de comportamiento, el alumnado debe diferenciar y utilizar cada lugar de acuerdo con su finalidad. El uso de espacios alternativos, en el centro o fuera de él, mediante visitas y salidas, permiten aprender del y en el entorno e incrementa la motivación.
11.Los agrupamientos dentro del aula deben ser flexibles para responder a las actividades y de las intenciones educativas y permitan responder a la diversidad del alumnado.
12.Los materiales han de ser variados y estimulantes, capaces de proporcionar múltiples oportunidades de aprendizaje. La utilización de textos debe estar equilibrada con el uso de materiales de lectura, herramientas interactivas, etc., que favorecen el uso colectivo y desarrollan valores de solidaridad y cooperación tanto en los niños y niñas como en sus familias.
13.Las actividades del alumnado deben de ser variadas y estar organizadas en función de una secuencia coherente. Se trata de asegurar el desarrollo de las estrategias de aprendizaje, de recogida y organización de la información; de revisión, de análisis; de búsqueda de alternativas; de síntesis y evaluación; de refuerzo, ampliación y la generalización.
14.Las actividades de las maestras y maestros tienen sentido en la medida en que orientan el proceso de aprendizaje. El aula es un espacio compartido y abierto en el que intervienen distintos profesionales con una misma finalidad. El tutor o la tutora y los especialistas constituyen un equipo docente que necesariamente comparte un mismo proyecto.
15.El espacio del recreo y el tiempo que se dedica a él forman parte de la propuesta educativa del centro, pues en él se generalizan aprendizajes asociados especialmente a la convivencia y en el respeto a las normas en el marco del juego. La organización adecuada de su espacio, la clarificación de normas de utilización y la posibilidad de acceso a los recursos del centro, facilitan una utilización positiva. Asimismo, la observación de la actividad del alumnado en el recreo nos aporta una información relevante sobre sus intereses y sobre el proceso de socialización. Las actividades complementarias se integran en la programación didáctica para contribuir a desarrollar los objetivos y contenidos de currículo en contextos no habituales (visitas a lugares significativos de la zona, salidas a la naturaleza…) y con la implicación de personas de la comunidad educativa. Las familias, con un papel relevante para las abuelas y abuelos, son una fuente primordial de recursos personales.

1 comentario:

  1. El punto dos supone un "estilo" integrador y solidario.

    El punto 12 y sobre todo el 13 apela a uno de los aspecto más creativos para los docentes, el diseño de estímulos y la secuenciación del trabajo del alumno. Un trabajo que puede llegar a convertirse en un arte.

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